Los grandes mitos sobre WordPress
WordPress es el gestor de contenidos más popular del mundo y esto hace que aparezcan una serie de mitos o información que pueden llegar a confundirte. A continuación vamos a desvelar los grandes mitos que circulan sobre WordPress.
WordPress no es seguro
Es uno de los mitos más extendidos sobre WordPress. En muchas ocasiones se dice que WordPress no es seguro por la cantidad de hackeos y pérdida de información que se produce tras la inyección de malware en una determinado página web. Una de las principales causas por las que se producen hackeos en una web, es por abandonar la seguridad de ese sitio. No se realizan actualizaciones de seguridad, se utilizan versiones obsoletas de plugins o plantillas y no se utiliza ninguna herramienta de escaneo en busca de código malicioso. Comparado con otros gestores, el núcleo de WordPress es bastante seguro. Las estadísticas indican que 41% de los problemas de seguridad reportados se originan en el hosting, por lo que no están relacionados a una vulnerabilidad del CMS. Si se instalan temas y plugins, las posibilidades de ser infectado o hackeado aumentan, aunque en estos casos la misma comunidad o la empresa que comercializa el software reacciona de forma ágil creando una actualización que soluciona el problema.
WordPress es solo para blogs.
No. WordPress nació como una plataforma de publicación de blogs, pero se ha desarrollado tanto en estos últimos años que actualmente es el CMS más utilizado del mundo, en concreto, el 59,7% de las páginas web que se crean con algún gestor de contenidos lo hacen en WordPress, lo que supone un 28,9% del total de todas las páginas del mundo. Por ejemplo la filial americana de la BBC o el canal de televisión de la CNN en español utilizan este gestor de contenidos para su web
Si mi proyecto crece, WordPress me limita
Está muy relacionado con el mito anterior. Además de crecer y convertirse en el rey de los CMS, WordPress se está convirtiendo también en la opción preferida de los que quieren montar un ecommerce. Gracias a la gran comunidad de desarrolladores y diseñadores que lo respalda, existen plugins y extensiones para todo. Otro de los aspectos por los que pensamos que WordPress nos limita son los temas disponibles. Existen un montón de plantillas gratis o de pago predefinidas, pero tú puedes personalizarlas a tu gusto sin problema con el editor CSS. O bien, si necesitas algo completamente a medida, puedes optar por diseñar una para tu sitio.