Inteligencia artificial de Facebook tomó vida propia
Facebook perdió el control del sistema, un programa que había sido creado para negociar en inglés con humanos, pero que “decidió” desarrollar su propio lenguaje y sus programadores no pudieron revertir el proceso, así que lo dieron de baja.
La inteligencia artificial y el machine learning (aprendizaje de las máquinas) son los dos pilares de la computación actual. En el universo digital los algoritmos para sistematizar tareas y optimizar procesos es lo que se impone, el presente y el futuro. Y Facebook no escapa a esa tendencia. De hecho tiene una división especializada en el desarrollo de inteligencia artificial.
En ese departamento se creó un sistema pensado para llevar adelante negociaciones. Pero apenas unos días después de su lanzamiento, el programa comenzó a hablar en un lenguaje ininteligible para sus desarrolladores.
En un momento los especialistas creyeron que se trataba de un error, pero luego llegaron a la conclusión de que, en realidad, la máquina había desarrollado su propio idioma y decidieron apagarla.
La inteligencia artificial consistía en dos agentes virtuales, llamados Bob y Alice, que comenzaron a conversar en un lenguaje propio que, al parecer, consideraban más efectivo para cumplir sus objetivos. A continuación se reproduce un fragmento de la charla de las máquinas, que fue difundido por el sitio Fast Company.
Bob: “I can i i everything else”
Alice: “balls have zero to me to me to me to me to me to me to me to”
En español se traduce así:
Bob: “Yo puedo yo yo todo lo demás”
Alice: “bolas tienen cero a mí a mí a mí a mí a mí a mí a”
Esto que parece un sinsentido, en realidad exhibe un patrón, según identificaron los desarrolladores a cargo del proyecto. El “yo” y “a mí” fueron utilizados para representar lo que se obtendría en un intercambio potencial (cabe recordar que la máquina estaba siendo entrenada para negociar), algo más puntual y práctico que las frases que se emplean en cualquier idioma convencional.
En síntesis, la máquina quedó fuera de control, comenzó a tomar decisiones por sí sola y desarrolló su propio idioma. Esto dejó en evidencia que la inteligencia artificial, con el nivel de tecnología alcanzado en la actualidad, ya es capaz de superar al maestro.
No es la primera vez que algo así sucede. El año pasado se supo de que un sistema de IA de Google, generó su propias forma de comunicación, tal como ocurrió ahora. En ese momento se comunicó la novedad con asombro pero no se despertó ninguna señal de alerta.



